Hace ya algún tiempo escribí un artículo sobre como montar un gateway utilizando Debian, iptables y dnsmasq. Siguiendo mi política de ir actualizando los artículos más útiles, y visto la aparición en mi toolbox de una nueva herramienta para simplificar iptables, le ha tocado una reescritura al artículo mencionado anteriormente.
Últimamente me he visto obligado a virtualizar en una máquina distinta de la habitual por un problema técnico; esto no sería un problema de no ser porque la arquitectura es de 32 bits. Eso me deja sin ninguna distribución prefabricada con la herramienta zerofree y me obliga a hacer una.
En algunas ocasiones no nos basta con tener un servidor único. Queremos tener un conjunto de servidores que se comuniquen abiertamente entre ellos usando una red privada, pero solo queremos exponer al mundo una sola dirección IP. El resto de servidores necesitan acceso a internet a través de un representante.
Finalmente ha sucedido: ha llegado el esperado lanzamiento de Debian Stretch. Como buen linuxero no me he podido resistir a hacer alguna instalación para probar, aunque solo sea como una máquina virtual. Su función, determinada por mi actual flujo de trabajo, va a ser como servidor de docker con docker-compose.